La ausencia de Sergio y Kike hizo que el material disponible para el equipo se viese mermado, y aunque Sergio nos prestó la bici no fuimos capaces de encontrar el portamapas, primer contratiempo. Así, que para no olvidar nuestros orígenes cutres Diego, ingeniero, diseñó un portamapas casero con manguera y goma elástica, toda una maravilla que nada tenía que envidiar a los portamapas profesionales. El segundo contratiempo llegó el mismo día de la competición, donde la falta de organización hizo que Cero Grados llegase a la recogida de dorsales tan sólo 10 minutos antes del cierre y sin todos los integrantes del equipo, ya que dejamos tirado a Diego en su casa con las dos bicicletas y tuvo que ser su padre el que ejerciera de asistencia improvisada (para algo que teníamos bien garantizado en Cero Grados........). Pero ahí no acababa todo, el tercer problema fue que nos presentamos sin comida contundente, es decir, unos sandwiches (Kike estará muy orgulloso, sólo comimos barritas), y lo que es peor, sin NADA de bebida. ¡Eso si que es planificación! Afortunadamente Nuñez se sacrificó por el equipo y, perdiéndose el final del briefing, se fue en busca de unos Aquarius.
Y en estas condiciones comenzó la competición. El raid consistía en tres etapas. La primera, con un tiempo máximo de 4 horas consistía en una orientación por relevos, una parte de BTT y un trekking. Además había que conseguir un máximo de 6 sobre 10 puntos de pruebas especiales. La segunda consistía en una parte de BTT y un trekking, y había que conseguir los 4 puntos restantes de pruebas especiales. El tiempo disponible era de 2h30min. Finalmente había una Final A para los diez priemeros clasificados y una Final B para los diez siguientes, consistiendo ambas en una prueba de orientación específica a completar en un máximo de 45 min.
El primero en tomar la salida fue Jorge. La cosa no empezó bien, ya que que la primera baliza que picó fue incorrecta (al igual que lo hicieron unas 20-25 personas más). El problema era que esta baliza pertenecía a la prueba de Trekking y estaba muy cerca de la baliza correspondiente a la de la prueba de orientación por relevos. Afortunadamente, poco después encontró la verdadera valiza y la picó en el mismo sitio. Sin embarggo, ante la duda de la validez de esto, optó por picar otras cinco valizas más para garantizar los cinco puntos. El siguiente relevo de la prueba fue Diego, que completó el circuito sin problemas en muy buen tiempo, advertido de la posible confusión. Así tras finalizar la primera sección, Diego y Nuñez partieron para completar la sección de BTT. Esta sección fue todo un éxito desde el punto de vista de la puntuación, ya que el conocimiento de la zona por parte de Diego les permitión conseguir todos los puntos posibles sin tener que recurrir jamás a la brújula. ¡Eso es orientación y lo demás son tonterías! El siguiente relevo se lo dio Jorge a Nuñez, por lo que la pareja Diego-Jorge fue la encargada de completar la sección de Tekking, disponiendo ya de poco menos de una hora y media. Puesto que aún el equipo no había conseguido ningún punto de pruebas especiales decidieron empezar por la prueba de kayak, situada en el Lago, muy cerca de la zona de transición. El recorrido lo completaron sin problemas (hay reportaje gráfico de la organización, por fín) pero la postura en el kayak acabaría acarreando problemas más adelante. El resto de la sección parecía transcurrir sin problemas, completando también una prueba especial de equilibrio (algo del tipo de De pino a pino), que nos permitía obtener los 6 puntos de pruebas especiales correspondientes a la etapa. Sin embargo, tras haber descartado alguna baliza imposible de conseguir en el tiempo máximo, ya de vuelta a meta con una buena puntuación acumulada, el hombre del mazo apareció y dejó K.O. a Diego. Aún así éste sacó sus últimas fuerzas y con un final impresionante (gritos incluidos) consiguió llegar a meta perdiendo el mínimo tiempo posible, al final 5 min y 3 puntos de sanción.
Entre etapa y etapa hubo un descanso de una hora que el equipo aprovechó para descansar, organizarse, comer e hidratarse. Tras el descanso, el equipo decidió que para dar descanso a Diego la salida la tomarían Nuñez y Jorge. Lo primero que hizo la nueva pareja fue completar la prueba especial de Padel-board (o algo similar) que consistía en ponerse de pie sobre una especie de tabla de surf más ancha y remar con un remo largo. La prueba la completó Jorge tras un inicio titubeante con viento en contra, dos puntos más. A continuación cogieron la bici para completar el circuito BTT, que tenía integrado el trekking. La opción tomada por el equipo fue coger el máximo número de balizas posible en bici, para después realizar la sección de trekking. La sección marchó a buen ritmo, y se hizo selección de las balizas a buscar ya que las fuerzas no permitían ir a por todas. Cabe destacar que se consigió además un punto en la prueba de tiro con arco a pesar de que Nuñez es zurdo y la chica del arco se emepñaba en decirle que tirase como los diestros. Al final no le hizo ni caso y fue cuando dio en la diana. Aún así al final de la sección de trekking Nuñez sufrió unos pequeños calambres y Vanesa De la rosa (o como se llame la señora más mayor del pelo corto gris), le dio un masaje. Faltaba ya sólo coger la bici y llegar a la zona de control. Con el tiempo más que justo ambos hicieron una bajada rápida por carretera, donde el fabuloso portamapas dijo que ya había cumplido y salió literaklmente volando, adios mapas. Afortunadamente el camino ya era conocido y se llegó dentro de tiempo, a dos minutos del cierre del control.
Ya solo quedaba ver si el equipo se metía en la final A o por el contrario se tenía que conformar con la B. Tras decididir Diego su no participación en la final, Nuñez y Jorge se prepararon para tomar la salida. Llgaba el momento clave, donde nombraban a los elegidos. Uno a uno fueron diciendo los dorsales de los participantes en la final A, y para nuestra desilusión el 37 no estaba entre ellos. Sin embargo, como consuelo fue el primer dorsal nombrado en la final B. Había que salir a por todas. Y así hicieron Nuñez y Jorge, que apuraron las últimas fuerzas para conseguir el máximo número de puntos posibles, 5 de 14 finalmente, y llegando a tiempo al cierre de control.
En definitiva, Cero Grados volvió a haver todo lo que pudo, recuperó el espíritu de Herrera del Duque y sobre todo pasó un gran día.
A la espera de las clasificaciones definitivas sólo queda dar las gracias y la enhorabuena a todos.
Salud y Cero Grados
p.d. cronica de Jorge Benet,todo un profesional!
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